Vilma Pereira, madre de Víctor Meriño, afirma que su caso es un falso positivo.
Foto
Jairo Cassiani

Share:

“Voy a luchar hasta la última gota de sudor por demostrar que mi hijo es inocente”

Familia de Víctor Meriño Pereira, señalado de asesinar al líder de víctimas Bernardo Cuero, asegura que su caso es un falso positivo.

Vilma Pereira está convencida de que su hijo es inocente y que se ha cometido una injusticia con él.

“Mi hijo es inocente, eso me lo va a decir siempre mi corazón. Él es inocente y voy a luchar hasta la última gota de sudor por demostrar que mi hijo es inocente”, dijo la mujer con la voz quebrada, debajo del dintel de la puerta de su casa en el barrio El Carmen, de Malambo.

De esa misma vivienda fue sacado Víctor Carlos Meriño Pereira por las autoridades, según contaron los familiares, hace siete días, señalado de haber asesinado al líder de la Mesa Departamental de Víctimas, Bernardo Cuero Bravo.

Víctor Carlos Meriño Pereira, señalado en la investigación de ser el presunto homicida.

Para los familiares del malambero de 32 años, han sido días difíciles, sobre todo por las audiencias y porque no han podido comunicarse continuamente con él.

Lo que están haciendo con mi hijo es una injusticia, es un falso positivo porque él no cometió ese homicidio”, manifestó Vilma Pereira, visiblemente molesta.

El asesinato al que se refiere ocurrió el pasado 7 de junio, en el barrio Villa Esperanza, del mismo municipio. Bernardo Cuero Bravo estaba en el interior de su casa en la carrera 2 Sur 3 con calle 4, viendo un partido de fútbol, cuando un hombre llegó preguntando por una casa en arriendo. Cuando el líder de víctimas salió a atenderlo, le dispararon en varias ocasiones, muriendo en el acto. El atacante salió corriendo y se subió como parrillero de una motocicleta, escapando del lugar.

Tras las investigaciones de la Policía, la Sijin y la Fiscalía, establecieron que Meriño era el presunto culpable del homicidio. Un juez con funciones de control de garantías legalizó su captura, le imputó los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico y porte ilegal de arma de fuego, y le dictó medida de aseguramiento intramural en la Penitenciaría El Bosque. Víctor no aceptó los cargos.

Los familiares de Meriño estuvieron protestando frente al Centro de Servicios Judiciales, durante las audiencias.

Inconsistencias

Para los familiares, en la detención de Víctor hubo inconsistencias y las pruebas que se presentan contra él “no son concluyentes”. En la puerta de la casa donde Víctor vive con sus padres y un hermano, recordaron cómo fueron esos momentos “tan tristes”.

Víctor estaba cepillándose los dientes, era cerca del mediodía y se acababa de levantar. Generalmente se levantaba tarde porque se acostaba tipo 4 de la mañana viendo televisión, por eso le decimos el búho”, relató uno de sus allegados.

“La Policía llegó y, como no tenían orden de allanamiento, lo hicieron salir de la casa para capturarlo. Él no se resistió ni nada y le dijo a la mamá que se quedara tranquila. Lo subieron a un carro y a cuatro cuadras de aquí lo bajaron y lo volvieron a ‘capturar’, esta vez en vía pública”, siguió con su narración.

 “Luego lo llevaron a la URI de Soledad, como por 20 minutos, de ahí lo llevaron en carro a Barranquilla. Cuando iban por La Chinita apenas fue que le leyeron los derechos. Aun así, el juez dijo que la captura había sido legal”, finalizó el familiar de Víctor Meriño.

Otra de las “incongruencias”, que expresaron los familiares, es que la en la declaración juramentada de la esposa de Bernardo Cuero, testigo presencial del hecho, señaló que el atacante había salido corriendo luego de asesinar al líder y saltó un muro de más de medio metro.

Familiares, amigos y vecinos del imputado están preparando una segunda marcha.

Es imposible que Víctor haga algo como eso, porque él está operado de la pierna izquierda y ni siquiera puede caminar rápido. Está imposibilitado físicamente para hacer ese tipo de esfuerzos”, explicó Anderson Meriño, primo del imputado.

Los familiares de Víctor Carlos Meriño Pereira han llevado pancartas a las audiencias y realizaron una marcha pacífica el pasado lunes 19 por las calles de Malambo, pidiendo su liberación. Aseguraron que planean seguir protestando pacíficamente “hasta que se haga justicia y lo liberen”.